No recuerdo la animalada
de calorías que quemamos el año pasado en Cavalls, pero si
que el Cuñao estaba muy por
encima de las 10.000, por lo
que sin lugar dudas junto con la hidratación
éste debe ser el tema que más debemos cuidar.
La semana previa a la prueba cada uno optamos por lo que mejor nos suele ir, a mí
me funciona bastante bien lo de la dieta
disociada escandinava, ya sabéis,
aquella que de domingo a miércoles no pruebas hidratos y te inflas a proteínas y
cesped, y a partir del jueves barra libre de hidratos, ....
La primera comida en grupo me imagino la
haremos en algún área de servicio en la AP-7,
con lo que disfrutaremos del menú
que allí podamos encontrar; la segunda comida será la cena
en el
refugio del Rebost, que fue a base de pasta y carne; el desayuno también corre por cuenta del
refugio, leche, café, zumos, pan con
fiambre, galletas, ....
Pero el jaleo empieza en el momento que nos ponemos en marcha:
Agua siempre de sobra, ya he
dicho alguna que otra vez que
además de los camel o bidones que normalmente usamos, no estaría de más que
alguno/s lleváramos un bidón extra por si acaso. En cada refugio podremos comprar coca-cola o
cervecita para reponer.
Mi idea es salir el viernes ya con la comida
de la prueba en la mochila, y tengo
pensado llevar lo siguiente,
salvo que alguien me dé alguna
idea que es para lo que está este blog:--
Llevar unos algún sandwich o bocadillito de pan de leche de mercadona (que
aguantan más que los normales), con algo
que tenga un "buen
pasar", que aporten energía
y que puedan estar más de 24 horas sin nevera, el año pasado opté por la
nocilla, y me fue bastante bien.
Recuerdo uno al almuerzo, otro a la hora
de comer, otro a media tarde, y de
los que le robamos a mi hermano
cuando se retiró dimos buena cuenta bien entrada la madrugada.
Para la hora de comer creo que repetiré con la ensalada de pasta con atún, pero
esta vez la buscaré sin pimiento rojo que me estuvo
repitiendo una semana. Habrá que investigar marcas.
La cena me parece que va a ser el quebradero de cabeza este año,
ya que
llegar al Refugio
de Lluis Estasen y pedir mesa para once me parece
que será poco menos que imposible, y además podemos perder mucho tiempo,
estoy abierto a cualquier sugerencia, pero había pensado en pillar tortilla de
patata envasada al vacío, pero no lo
tengo claro, admito (necesito) propuestas. A lo mejor en
el refugio nos pueden servir un caldo y
acompañar con algo que llevemos en la mochila.
Otras posibilidades que estoy barajando para
el tema de los bocadillitos, es cambiarlo
por membrillo, pasteles de
boniato, las famosas
bolsitas individuales de frutos secos de mercadona, además de los geles
y las pastillas de isostar para los
bidones.
Con todo esto debo hacerme la bolsa de comida
que debo meter en la mochila.
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